20 de mayo de 2010

LAS ESCALERAS EN LA ARQUITECTURA


Recientemente estaba leyendo sobre las escaleras como elementos dignos de buenos diseños, hoy en día las escaleras han cobrado gran relevancia en la participación de la arquitectura, como elementos importantes desde el punto de vista presencial.

Las escaleras, anteriormente, eran consideradas un elemento agregado a la obra arquitectónica, su función básicamente era la que todos pensamos que es: la de trasladar a las personas a los diferentes niveles de una edificación.

Hoy en día ese concepto a pasado a ser intrascendente, la importancia que le da el arquitecto, y las exigencias del medio, hacen que ésta sea proyectada con diseños presenciales, son como mencionan algunos, hasta cierto punto, la "vedette" de la edificación, aunque esto se podría discutir, ya que una escalera no es el fin exclusivo de la arquitectura, pero su importancia que está cobrando en estos momentos, es de tener como referencia para ulteriores consideraciones.

Las escaleras por tanto, están cumpliendo otra función, que es la de formar parte de manera "activa", entiendase esto último como pasar a tener una dedicación casi exclusiva de ella, de manera que se ocupe un tiempo apropiado en su concepción, esto hace que la competencia se genere, al haber cada vez más arquitectos que dedican un "tiempo extra" a su elaboración más detallada y "artística", haciendo que los resultados sean cada vez más vanguardistas y propios de una especialización.

Como conclusión, creo que la escalera va ha seguir cumpliendo su función original, que es la de trasladar a personas entre los diversos niveles de una edificación, permaneciendo siempre el nuevo factor, que es la de darle un valor agregado a la construcción, haciendo que las propuestas sean más innovativas y creativas.

A manera de corolario hago mención que en este post he tratado las escaleras "expuestas", es decir aquellas que son planteadas en un primer o/hasta un segundo piso como elementos propios de ser "observados", de manera que las escaleras de emergencia o aquellas que comunican a pisos de más altura conservan una propuesta "clásica", por tanto su diseño es más funcional que "presencial".

Ref.: Foto de carátula del libro "Escaleras" de Silvio San Pietro - Paola Gallo.


10 de mayo de 2010

LA IMPORTANCIA DEL GRAFISMO EN LA ARQUITECTURA



Estoy leyendo varios libros sobre métodos de expresión en arquitectura, y me he dado cuenta de la importancia que tiene la expresión gráfica como modo de plasmar aquello que queremos que la obra arquitectónica sea.

La forma de ayudarnos con la expresión gráfica para establecer un vínculo entre lo queremos hacer y lo que nos significa cómo la queremos representar, es un nexo intrínseco, diría, casi "matrimonial", entre lo que tenemos en mente y la manera de representarlo en el papel, para poder dar a conocer -a nosotros mismos- los avances y modos de hacer arquitectura.

Hay diversos métodos de expresión, desde la maqueta hasta las ayudas computarizadas en 3D de lo que queremos hacer, pero definitivamente el primer nexo entre el arquitecto y su próxima obra es como el pintor cuando está frente al lienzo, es decir la acción que establece el arquitecto delante de un proyecto es básica y primordialmente a través del grafismo, no podemos estar exentos de esta forma de expresar aquello que querramos representar, es el primer contacto entre la obra y su creador, todo aquello que querramos que se materialice, se realizará como primer acercamiento en el "papel" y a través de la materia de este post.

El grafismo, por tanto, es casi de vital importancia en la implicación que pueda generarse para la concreción de un proyecto, allí expresamos todo aquello que queramos que sea, como ya lo he mencionado, es la forma de dar forma a las ideas que tengamos en la "cabeza", es una forma de dar vida a aquello que en nuestra mente está, y el método más loable e idóneo de acercarnos a aquello que próximamente se concretará en el proyecto que hayamos ideado.

2 de mayo de 2010

¿MITO O REALIDAD?. ¿LIMA ESTÁ SOBRE UN DESIERTO?


Varias veces que escuchaba decir que Lima estaba erigida sobre un desierto, me ponía a pensar si esto era verdad. Pensaba rápidamente en los distritos sobre los que se define actualmente esta ciudad; mis años de niñez que la pasaba jugando, visitando para ser más exactos, los distritos de La Molina o la actual San Borja y mis viajes al norte chico, en al que pasaba por Puente Piedra, descartaban totalmente toda posibilidad que Lima haya crecido sobre un desierto, porque la verdad que todo estaba lleno de verdor y con lugares con sembríos.

Para reforzar esta idea, las historias que me contaban, y aún me cuentan, mis tíos y familia en general, que decían que toda la zona de San Isidro, Surco, Surquillo, eran valles fértiles, dando fe que Lima no estaba construida sobre un desierto, si no sobre tierra fértil y buena.

Tal vez poniendome a pensar un poco más en los distritos formados en Lima Sur, principalmente, notaría, que efectivamente por allí sí existían zonas desérticas, pero en líneas generales, no creo que Lima se haya formado explícitamente y netamente sobre un desierto.

Para descartar esta idea que tengo habría que realizar investigaciones, que creo no serán tan difíciles, arrojando, como creo yo, que Lima era un valle fertil y no desértico.